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Cuando se trata de criar niños sanos, uno de los factores más importantes es asegurarse de que reciben todos los nutrientes que necesitan, es el consumo de vitaminas. 

El sistema nervioso es una parte integral del cuerpo humano; controla y coordina las actividades, ayuda a formar recuerdos, regula las emociones y contribuye a los procesos de aprendizaje. [1]

Nuestra vida cotidiana nos exige tener la energía necesaria para llevar una vida activa y productiva, sin embargo, en algunas ocasiones no contamos con las herramientas y energía necesaria para poder llevar a cabo nuestras actividades.

Las vitaminas del complejo B son sustancias cruciales para el desarrollo y crecimiento del ser humano, ya que ayudan al proceso que hace nuestro cuerpo para obtener energía de la comida que consumimos. Estas también ayudan a la formación de los glóbulos rojos. [1]

El complejo B consiste en ocho vitaminas esenciales para el correcto estado de salud y desarrollo de nuestro cuerpo. Estas vitaminas tienen diferentes roles en el organismo, pero en general, ayudan a convertir en energía los alimentos que consumimos, es por esto que son vitales. [1-4]

La tiamina es una vitamina hidrosoluble, parte del complejo B, que tiene muchas funciones en el organismo. Entre ellas, sirve para suministrar energía al cuerpo, al ayudar a metabolizar los carbohidratos que consumimos. [1,2]